¿Quieres darle un toque dulce y delicioso a tus postres? Fácil y rápida de hacer, esta salsa es perfecta para acompañar helados, tortas y mucho más. ¡Anímate a prepararla!
Tiempo de Preparación: 8 Minutos
Tiempo Total: 8 Minutos
Porciones: 1 Porciones
Hay recetas cuyo valor radica en que ayudan a enriquecer ciertos platos, dándoles un aspecto llamativo o un sabor diferente .
Esa es la función de los aderezos y de las salsas. De estas hay muchas y las más comunes son la de chocolate, la de caramelo y la de frutilla.
Pero en Sudamérica, la infaltable es la salsa de dulce de leche. No podés irte sin dejar de ver esta receta, porque hacer una salsa de dulce de leche es fácil y rápido, y resulta un excelente acompañamiento para el helado, los panqueques o los waffles.
100gr Leche o Crema
100gr Dulce de Leche
Mezclar el dulce de leche repostero con la crema y revolver. Ir llevando al microondas entre 15 y 20 segundos para que el dulce de leche sea más fácil de disolver. Consejo: si la mezcla queda demasiado líquida, podés llevarla a fuego bajo o medio en una sartén y revolver constantemente durante 10 o 15 minutos hasta que se vuelva más espesa.
Dejar reposar una hora a temperatura ambiente y luego llevar a la heladera.
El día internacional del dulce de leche fue decretado bajo el aval del Centro Argentino de Promoción del Dulce de Leche y Afines en el año 1998. En cuanto a sus orígenes, estos son algo difusos.
Cuando el General San Martín cruzó la frontera para arribar a Chile, en 1817, alguien le ofreció "manjar", aquel nombre por el que los chilenos llaman al dulce de leche. Tanto le gustó al Libertador que tomó la decisión de llevar a su campaña del Perú una buena provisión de este producto. Algunos historiadores aseguran que este producto ya había cruzado la cordillera en tiempos virreinales y se utilizaba en la zona de Cuyo y Tucumán, basados en los registros de jesuitas.
Una posibilidad es que el dulce de leche venga desde antes de los tiempos de la independencia. En el año 1806, en Buenos Aires, estalló el escándalo de la esposa de Tomás O’Gorman, Ana Perichon, y su romance con Santiago de Liniers. Se dice que "Madama O’Gorman", para comienzos del siglo, ya tenía entre sus recetas predilectas al dulce de leche.
Se dice que el general Juan Lavalle, luego de fusilar a Manuel Dorrego, había quedado en un complicado entramado entre Juan Manuel de Rosas, el líder federal, y sus aliados unitarios. Debido a que José de San Martín se negó a hacerse cargo de la gobernación, Lavalle no tuvo otra opción que arreglar con Rosas, por lo que cabalgó al campamento enemigo situado en Cañuelas.
Al llegar, se encontró con que Rosas no estaba, por lo que Lavalle pidió unos mates y se acostó a dormir en la cama de Rosas.
Una de las criadas de la estancia consideró el acto como una falta de respeto a la autoridad de Rosas, por lo que salió a notificar la novedad, sin notar que estaba olvidándose al fuego la leche con azúcar que estaba preparando para una lechada, hecho que crearía involuntariamente el dulce de leche. Al llegar y ver la escena, Rosas ordenó dejarlo descansar a Lavalle y, cuando este despertó, acordaron las condiciones del Pacto de Cañuelas y entre mate y mate probaron el dulce de leche, que tanto les gustaría que ayudarían a extenderlo por el resto del país.
Esta historia, además de ser incomprobable (no han habido pruebas que demostraran su veracidad), también existe en su versión europea tomando a Napoleón Bonaparte como protagonista y situando el contexto en 1804, naciendo así el dulce de leche.
El hecho de que su base sea el azúcar y la leche, y que su característico color se consiga debido a la reacción de Maillard, permite asumir que posiblemente muchas culturas lo hayan elaborado en diferentes momentos de la historia.
Existen quienes se aventuran en concluir que el dulce de leche habría nacido siglos atrás en Indonesia y en la India, siendo descubierto por los españoles al conquistar y rebautizar las islas Filipinas, quienes lo habrían transportado a América.
Otros sostienen que el dulce de leche habría sido introducido en tierras americanas por los esclavos, quienes utilizaban su ingenio para que diversos alimentos se mantuvieran comestibles.
Los brasileños también entran en el debate sobre su origen. Afirman que durante en siglo XVIII ya se producía en Mina Gerais. Ni hablar de los rusos, que para ellos no se llama dulce de leche sino "varione sgushonka" y lo habrían hecho los tártaros en la época de Marco Polo.
El dulce de leche es llamado así en Argentina; en Chile recibe el nombre de "manjar", mientras que el Perú lo llaman "manjar blanco"; en México ha sido nombrado como "cajeta" (no te rías) y "queso de urrao" en Bolivia; por su parte, Cuba lo conoce como "fanguito" y los panameños como "bienmesabe"; Venezuela, Colombia y Guatemala comparten el título de "arequipe".
Porción: 1 Porción ( 100g ) | Calorias: 119kcal | Carbohidratos: 4.4g | Proteínas: 3.1g | Grasas: 10g | Grasas saturadas: 6.3g | Colesterol: 35.5mg | Sodio: 42mg | Azúcar: 2.6g | Fibra: 0g | Grasas Insaturadas: 3.7g | Grasas Trans: 0g
*Disclaimer NutricionalPublicado por Federico Quevedo, el 2 de febrero de 2022.
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