Escones de Limon

¡He aquí uno de los mejores acompañamientos del té! Un panecillo de masa suave y un radiante color dorado que cabe en la palma de nuestra mano. Así es, estamos hablando de los scones, los que nunca pueden faltar en una buena cafetería o panadería. Los hay de queso, de fruta, de leche, los treacle scones, los tattie scones… Si querés saber cómo prepararlos y darles un glaseado con sabor a limón, seguí leyendo esta receta. No te das una idea de lo fácil que será:

Video paso a paso

Ingredientes para Escones de Limon

• Ralladura de Limón

• 35gr Azúcar

• 250gr Harina 0000

• 3gr Sal

• 3gr Polvo para Hornear

• 3gr Bicarbonato de Sodio

• 85gr Manteca

• 125ml Leche

• 15ml Jugo de Limón

¡Consejo! La masa de los escones es una masa muy húmeda, por lo que es importante que no le agregues más harina.

Cómo hacer Escones de Limon

¿Cuál es tu variedad preferida de scones? ¿Has probado alguna original y exótica? ¡Indicámelo en los comentarios y acompañame en mis redes sociales para hacer más grande la comunidad gastronómica!

Más sobre los escones

Los escones o scones son panecillos individuales y redondos, aunque también pueden presentarse de forma triangular y, más raramente, en cuadraditos. Es un plato típico de la gastronomía de Reino Unido y originario de Escocia. Este alimento es común en los desayunos y meriendas no sólo de Reino Unido, sino también de Irlanda, Australia, Canadá, Nueva Zelanda, Estados Unidos y Argentina. Se presume que el antepasado directo del scon es el bannock, una tipo de pan plano cuyas porciones triangulares también son llamadas scones.

Los ingredientes que se utilizan habitualmente para la preparación de los scones son harina de trigo, avena o centeno, manteca y levadura. Se sirven templados o calientes y habitualmente se abren por la mitad. Son un bocado casi inseparable de la costumbre del high tea en Escocia. Se los suele acompañar con clotted cream (una especie de nata gruesa proveniente de una raza específica de vacas criadas en una región de Reino Unido). En el resto del mundo, se acostumbra a untarlos con queso crema y mermelada de frutos rojos.

Variantes de los escones

Los scones pueden ser dulces y contener pasas de uva, queso, arándanos o dátiles. También existen versiones saladas como los soda scones o los tattie scones, que serían unos pasteles de harina de papa fritos muy comunes en Escocia. En su país de origen, los scones que son freídos en lugar de horneados reciben el nombre de griddle scones. Esta tradición de freírlos es muy frecuente en Nueva Zelanda.

La leyenda de los scones: la Piedra del Destino

Como ya hemos dicho, el origen de este aperitivo típico de la cocina inglesa es escocés. Lo que muchos no saben es que su nombre se relaciona con la Piedra del Destino (The Stone of Destiny).

Según cuenta la historia, siglos atrás las tribus escocesas del norte presenciaron el impacto de una roca gigantesca que impactó y despedazó las llanuras, convirtiéndolas en acantilados. Tal colisión espectacular fue apreciada por los habitantes de las tribus como la señal profética del advenimiento de un imperio nuevo.

Luego de caminar extensamente, arribaron al sitio de la colisión y decidieron extraer un pedazo de la roca a modo de reliquia. Esa piedra divina sería llamada la Piedra del Destino y sería heredada secretamente a lo largo de los siglos hasta la era de los copistas, donde comenzaría a colocarse por debajo del trono de cada nuevo rey de Escocia.

Eduardo I, rey de Inglaterra, deseaba poseer esta piedra divina y para conseguirla organizó un ataque para conquistar Escocia y obtenerla definitivamente. Con el tiempo esta roca llegaría a la Abadía de Westminster, Londres, y se mantuvo resguardada en secreto.

Un repostero joven que se refugiaba en la Abadía de Scone recordó la codiciada piedra profética y con nostalgia recordó los bollos de pan en su hogar durante los años de guerra. A partir de aquel momento, se dedicó a preparar unos panecillos que semejaban la forma de la piedra. Aunque visualmente no agradaron a los monjes, al probarlos quedaron fascinados.

Rápidamente estos panes dulces fueron distribuidos por el pueblo, lo que ayudó a saciar el hambre de los más necesitados. Este nuevo panecillo, nacido a partir del recuerdo de la leyenda de la Piedra del Destino, recibió el nombre de scone, en memoria de la Abadía de Scone.