¡Estas galletitas de Avena con Chocolate quedan bien crocantes y son lo mejor para cualquier merienda!
Tiempo de Preparación: 8 Minutos
Tiempo de Cocción: 15 Minutos
Tiempo Total: 23 Minutos
Porciones: 25 Galletitas
¡No te imaginas lo que son estas galletitas! Una crocancia que al partirlas te hacen pensar en que nunca se te acaben. Un acompañamiento de primera para tus meriendas o para llevar al trabajo y compartir con tus compañeros. Inigualable combinación entre lo saludable de la avena y la intensidad de los chips de chocolate.
120gr Harina
3gr Polvo para Hornear
5gr Sal
113gr Manteca
65gr Azúcar Blanca
140gr Azúcar Rubia
Esencia de Vainilla
1 Huevo
135gr Avena
150gr Chips de Chocolate
En un bol agregar la manteca a temperatura ambiente, el azúcar blanca y el azúcar rubia. Batir hasta llegar a una textura cremosa.
Agregar un huevo y esencia de vainilla, volver a integrar.
Agregar la harina y el polvo para hornear, preferentemente sobre un tamiz. Agregar la avena, la sal y volver a integrar.
Echar los chips de chocolate reservando antes un puñado e incorporar con una espátula.
Tapar y llevar a la heladera por una hora.
Hacer bolitas con la masa y ponerlas sobre una placa para horno, arriba de un silpad o papel manteca para evitar que se peguen.
Decorar pegando los chips de chocolate que reservamos sobre las galletitas.
Llevar al horno a 180° por entre 15 a 20 minutos.
Este tipo de galletitas datan del siglo XX y tienen una historia interesante detrás. La primera receta conocida de galletas de avena vino acompañada de Quaker Oats Company, que empezó a dedicarse a la fabricación y distribución masiva en el año 1908. Esta receta, que se anunciaba como "tortas de avena", venía impresa en el dorso del paquete en los que eran comercializadas, incluyendo los ingredientes siguientes: manteca, azúcar, huevos, harina y avena. Con el correr del tiempo, la receta de estas tortas de avena se vería reformulada, siendo rebautizadas como "galletas de avena". Para darle forma, se usaron copos de avena molidos (esto es, harina de avena) obteniendo así piezas más finas, compactas y consistentes que las de la anterior versión.
Con el paso del tiempo, se añadió el salvado de avena a modo de ingrediente para obtener la forma de unas galletas que pudiesen ser comidas por un mayor número de personas, incorporando así a quienes deseaban explotar los beneficios y propiedades del salvado de avena, producto resultante del refinado del grano de avena que corresponde a las capas externas del grano, más concretamente al pericarpio y sus subcapas: endocarpio, epicarpio y mesocarpio.
La avena sativa es una planta perteneciente a la familia de las gramíneas. Este grupo de plantas es de los más importantes en lo que a la alimentación de la especie humana respecta, puesto que sus frutos secos resultan ricos en almidón, el cual es un hidrato de carbono complejo útil como fuente de energía para nuestro organismo. Los copos de avena son aplanados mediante cilindros, sin eliminación de ninguno de sus componentes. Se consume tanto el cereal completo (los copos de avena) como su salvado. Las semillas se emplean en ocasiones con objetivos terapéuticos.
Es considerado uno de los cereales más saludables gracias a propiedades específicas (coronándose como un súper cereal). Múltiples civilizaciones la han utilizado como fuente de alimentación primaria.
Su contenido de grasa saturada es bajo y contiene sal de forma natural. Su consumo sirve para bajar los niveles de azúcar en sangre (trabajo hecho por sus beta-glucanos, que regulan la glucosa), volviéndose un producto recomendado para personas bajo cuadro de diabetes.
La avena coopera en la reducción del colesterol y en la reducción del riesgo frente a patologías coronarias vinculadas a los altos niveles de colesterol en sangre (considerado un factor de riesgo importante en enfermedades cardiacas).
Los granos de la avena integral brindan buenas cantidades de fibra, las que contribuyen al equilibrio saludable del sistema digestivo.
En lo que a su variedad de vitaminas y minerales respecta, este súper cereal contiene vitamina B1 (conocida también como tiamina), que beneficia nuestro metabolismo energético, como también el funcionamiento de nuestro corazón, de la función psicológica y del sistema nervioso. Está presente también la vitamina B6, la cual ayuda al funcionamiento del sistema inmunológico y a metabolizar las proteínas y el glucógeno. Su vitamina B9 (ácido fólico) beneficia la síntesis de aminoácidos como así también la formación normal de la sangre, volviéndose una buena incorporación en la dieta de madres gestantes.
Contiene, además, hierro, el cual ayuda a que se normalice la formación de glóbulos rojos y mejora el sistema inmunológico, el transporte de oxígeno y la función cognitiva. Aporta también magnesio, el cual es útil para el funcionamiento óseo, la salud mental, el funcionamiento muscular y regula el equilibrio de los electrolitos. Favorece la reproducción y la fertilidad, al tiempo que protege las células de la oxidación.
Porción: 1 Galletita ( 31g ) | Calorias: 134kcal | Carbohidratos: 18.4g | Proteínas: 2g | Grasas: 6g | Grasas saturadas: 3.4g | Colesterol: 18.4mg | Sodio: 92mg | Azúcar: 10.7g | Fibra: 1.1g | Grasas Insaturadas: 2.6g | Grasas Trans: 0.1g
*Disclaimer NutricionalPublicado por Federico Quevedo, el 19 de enero de 2021.
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