¿Ves lo que son esos pedazos de manzana bien blanditos en el interior y por sobre el budín? ¡Tanto si sos un experimentado como si nunca preparaste uno, esta receta de budín te va a dejar como el campeón de la merienda!
Tiempo de Preparación: 10 Minutos
Tiempo de Cocción: 35 Minutos
Tiempo Total: 45 Minutos
Porciones: 10 Porciones
La manzana es lo primero que se nos viene a la cabeza cuando pensamos en frutas. Es un fruto bueno y saludable, ya que suele ser tolerado por la mayoría de las personas, pero tal vez no sea el más divertido. Hay que poner en juego nuestra creatividad gastronómica para ello. Y este budín de manzana será la oportunidad. De manera fácil y rápida conseguiremos un postre digno de una merienda inolvidable.
150gr Harina
120gr Manteca
170gr Azúcar
300gr Manzana
Polvo para Hornear
Esencia de Vainilla
2 Huevos Grandes
40ml Ron
Sacar el corazón a las manzanas y cortarlas en gajos.
En un bol agregar la manteca a temperatura ambiente y el azúcar. Batir hasta llegar a una textura cremosa.
Agregar la esencia de vainilla, 2 huevos y ron (opcional), volver a integrar.
Agregar la harina, y el polvo para hornear. Batir, esta vez pasando una espátula para remover la harina pegada en los bordes del bol.
Agregar la manzana e integrar por última vez.
Enmantecar, enharinar el molde y echarle la preparación.
Llevar al horno de 30 a 40 minutos a 180°.
Esta fruta deriva del manzano, un árbol proveniente de la familia de las Rosáceas, que contiene casi dos mil especies
Esta fruta es fruto del manzano, aquel árbol que deriva de la familia de las Rosáceas, la cual contiene cerca de dos mil especies de plantas herbáceas, árboles y arbustos que se encuentran en las regiones templadas alrededor del mundo.
Ya sea cruda, en puré, cocida o en jugo, nuestro sistema inmune estará agradecido de recurrir a ella. Estos son algunos de los beneficios de esta noble fruta:
Disminuye el colesterol gracias a las fibras que contiene y cuida el corazón al disminuir el nivel de moléculas inflamatorias relacionadas con problemas cardíacos. La pectina presente en la manzana inhibe la absorción del colesterol en el intestino producido por la bilis. Además, evita que se acumulen lípidos en los vasos sanguíneos, reduciendo considerablemente las posibilidades de desarrollar enfermedades del corazón.
Preserva el bienestar del colon ya que produce químicos que evitan el desarrollo de células cancerígenas. También la fibra que contiene la manzana mejora el tránsito intestinal, razón por la cual se recomienda ingerirla con cáscara si lo que se desea es evitar la constipación. En cambio, para evitar diarreas se aconseja consumirla sin su cáscara. Tal vez uno de los caracteres más atractivos sea su acción como estimulante del movimiento peristáltico de nuestro intestino. Es decir, algunas de sus sustancias, como los ácidos málicos y los ácidos tartáricos, combaten la formación de bacterias y fermentos nocivos en el intestino.
Mejora la memoria ya que contiene vitaminas B1 y B6 que evitan el cansancio mental y refuerzan la memoria. La quercetina, que es una de sus sustancias funcionales, normaliza el funcionamiento del cerebro al resguardar sus células.
Esta fruta ayuda a evitar la obesidad gracias a su bajo aporte calórico. Lo más recomendable es ingerir una manzana verde en ayunas. Esta variante aporta mayor sensación de saciedad y colabora facilitando la digestión.
Contribuye con la salud dental, puesto que limpia los dientes y obstaculiza la formación de placas bacterianas. Es por esto que se recomienda ingerir una manzana luego de finalizada la cena. Sus ácidos naturales aumentan la producción de saliva. También regulan el PH de la boca, previniendo así el mal aliento.
Su piel hervida a fuego lento por al menos quince minutos es excelente para la preparación de un té de cáscara de manzana. Beberlo antes de recostarnos mejorará nuestras dificultades para conciliar el sueño.
En el aspecto de su valor nutricional, destacan el potasio, la vitamina E, la celulosa, la vitamina C, la fibra (soluble e insoluble), los hidratos de carbono, las proteínas, la provitamina A y el magnesio.
La función de algunos de sus componentes le brindan un carácter antioxidante, especialmente en el consumo de su cáscara, la cual contribuye a mejorar la absorción de los nutrientes y proteínas de otros alimentos, razón por la cual los nutricionistas suelen recomendarla luego de una comida.
Porción: 1 Porción ( 78g ) | Calorias: 232kcal | Carbohidratos: 32.6g | Proteínas: 1.7g | Grasas: 10g | Grasas saturadas: 6.2g | Colesterol: 26.5mg | Sodio: 2mg | Azúcar: 20.1g | Fibra: 1.1g | Grasas Insaturadas: 3.8g | Grasas Trans: 0.4g
*Disclaimer NutricionalPublicado por Federico Quevedo, el 26 de mayo de 2020.
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